Costumbres afganas

Tiempo de lectura: 7 minutos

Vivi en el norte de Afganistàn, en una ciudad llamada Maimana ( en la frontera con Iràn,Turkmenistàn y Uzbequistàn), capital de la provincia de Faryab. Segùn la tradición, Maimana fue fundada en el 586 a.C. Sus habitantes heredaron las costumbres de sus antepasados de Asia Central, pero la cultura afgana es una mezcla muy complicada de diferentes etnias y lenguas y es difìcil determinar un patròn (o “perfil” ) que defina al afgano como tal.

La poblaciòn es diversa desde el punto de vista étnico y fragmentada a causa de la geografía montañosa, que compartimenta las regiones de asentamiento de cada tribu. Como país, Afganistàn carece de una identidad única. El afgano no se considera “afgano” sino “pashtoon”,”uzbeco”, “tadjiko”, “hazara”, etc. Los idiomas oficiales son el Dari y el Pashtun,lenguas derivadas del Persa antiguo.

La vida corriente del afgano es dura,severa y rigurosa. Como buen musulmàn,su percepciòn es muy influenciada por la creencia: “Alà controla todos nuestros asuntos y todo ocurre segùn su voluntad”. Cumplen a diario los preceptos islámicos,aunque no dejan de tomar algùn vino de vez en cuando ( en Faryab se hacen muy buenos vinos caseros) y fumar durante el Ramadan.

La lealtad del afgano es primero con su familia,grupo de parientes,clan o tribu, pero aclaran: “La lealtad del afgano no se compra. Se alquila”.Su actitud respecto a la moral es inflexible.Acentùan sus responsabilidades individuales respecto a hacer cumplir y mantener el honor.La conducta personal puede afectarlo, así que es esencial vivir acorde a estrictas reglas de conducta. La devociòn y el estoicismo son conductas admiradas.

La sociedad es mayoritariamente rural y està concentrada a lo largo de los ríos. Las aldeas circundan pueblos màs grandes que constituyen centros comerciales,nùcleos administrativos y nudos de comunicaciones.En esos pueblos se encuentran las “caranserais” (posadas) y las “chaykhanas”,sitios de encuentro dònde los hombres se reúnen a charlar,fumar y tomar té. El “bazar” (mercado) se ubica en la calle principal del pueblo.

Consumen tè ( en Dari, “choi”) a toda hora,sin azúcar y acompañado con caramelos. El pan ( en Dari, “tapati”) es confeccionado a mano, en forma de cìrculo de unos 40 centìmetros de diàmetro. Tambièn hay formas alargadas, tipo “pan flauta”, pero de mayor tamaño. Los más pudientes lo confeccionan con harina de trigo. Los más pobres,con harina de cebada. El pan es considerado un alimento sagrado. Es una ofensa poner la parte inferior hacia arriba, donde està tostado por la cocción.El pan se vende en el mercado y lo exhiben directamente en el piso encima de una frazada o tela.Un dìa fui a la “panaderìa”,en una esquina de Maimana. Me atendieron dos niñas muy simpáticas. Tenìan los panes prolijamente apilados directamente sobre el suelo. Pedì dos y paguè el doble de su valor.Le sacudieron el polvo y me los entregaron, obsequiando una encantadora sonrisa.

La comida (almuerzo o cena) se hace en común,sentados alrededor de una alfombra donde se colocan grandes platos. Previamente ofrecen una jarra con agua,una palangana y una tohalla para lavarse y secarse las manos. No usan tenedores ni cuchillos. Se come con la mano derecha,usando trozos de pan para llevarse la comida a la boca.(La mano izquierda se reserva para tareas “impuras”, como lavarse las partes ìntimas o asearse después de defecar.Es una ofensa ofrecer algo con esa mano).Como gentileza,me ofrecían un tenedor ,pero yo nunca lo usaba.Tampoco emplean sillas. Acompaña cualquier comida con té. Consumen melones ( en Afganistàn crecen los mejores del mundo y son de un tamaño descomunal), sandía y uvas,que son muy buenas,particularmente la uva blanca.Comen gran cantidad de berenjenas.Tambièn papas y maíz.Consumen yogur hecho con leche de cabra.

Cuando terminan,es normal escuchar unos eructos bien fuertes,demostración de que han disfrutado de la comida. No se lavan los dientes,tan solo se pasan el dedo ìndice derecho a modo de cepillo,habiendo mojado el mismo con un poco de agua. Se limpian las manos con una servilleta que se pasan de uno a otro.

La comida nacional afgana es el “palao”, preparado con arroz y pasas de uvas. Otro plato tìpico es el “kabob”, una especie de “brochette” .Las hay de dos tipos: de carne-las más caras –o de vísceras –de menor precio.Tambièn hacen estofado con carne de cabra, una comida con mucha grasa y muy condimentada. No usan demasiado picante.La carne no es muy accesible a los pobre,considerando,por ejemplo,que una cabra costaba unos 200 dòlares y un funcionario público ganaba 40 afganis por mes ( El afgani es la moneda oficial.Cincuenta afganis equivalen a un dólar).Todos los comestibles vienen de contrabando del centro de Asia.Se venden en el mercado y en pequeños comercios

Resulta difícil adaptarse a las costumbres y al ambiente afgano. Me llevò un par de meses poder comer en un restaurante. Se debe dejar el calzado a la entrada de la casa o lugar al que se ingresa,sea público o privado. Se imagina el lector el imponente mal olor dentro del recinto, porque salvo para las abluciones rituales (lavado de la cara, manos y antebrazos), el uso del agua se restringe al máximo,por ser demasiado valiosa para malgastarla en duchas o baños de inmersión. No hay agua corriente.La sacan de pozos.Una familia común (lo normal son ocho a diez hijos) consume màs de 80 baldes de agua por dìa,segùn me decían los afganos.

Pese a rechazar todo lo extranjero,los afganos son muy amables en el trato y tienen muy marcadas reglas de cortesía.Aplican al pie de la letra las normas de hospitalidad. No se debe rechazar la comida ofrecida..Brindan trato preferencial a las personas de mayor jerarquía, a los de mayor edad –respetan mucho a los ancianos- y a los invitados. En una ocasiòn me invitaron a un almuerzo para conmemorar el primer año del fallecimiento de un hombre miembro de la familia. “ Està viviendo en mejor lugar” –me dijo su hija. El lugar central del salòn o patio donde se hace la fiesta lo ocupan los hombres. En los alrededores, alejadas, permanecen las mujeres:madres, tías primas,amigas,todas con sus hijos. Un reunión común reúne un centenar de personas. El baile es usual. Primero bailan los hombres y después las mujeres.

Las normas exigen saludar a todas las personas al llegar a una reuniòn o visita. Los afganos son muy sensibles en este aspecto.Los hombres estrechan la mano,pero si hay confianza y como señal de aprecio,el gesto se complementa con un abrazo colocando la mejilla uno contra el otro pero sin besarse. Entre hombres el saludo militar es normal. Tambièn como señal de respeto se puede inclinar el cuerpo en una reverencia no muy pronunciada, apoyando al mismo tiempo la mano izquierda sobre el corazòn. Las mujeres pueden inclinarse,pero no se llevan la mano al pecho por ser èste un gesto masculino. No pueden saludar a los hombres si èstos no inician el saludo. Las mujeres no pueden tocar a los hombres,ni siquiera en los brazos o la espalda. Solo hay besos de saludo entre hombres y mujeres muy cercanos,como hermanos, primos o esposos.

Me llamò la atenciòn el respeto que tienen hacia las personas que portan uniforme militar. Segùn me explicó el señor Sakhi,uzbeco,muy conocedor de las costumbres de su país, “los afganos son un pueblo tradicionalmente guerrero y hacen distinciòn con las personas que han participado en guerras o combates.Por ende,respetan a los uniformados porque lo ven como un guerrero”. Yo había apreciado eso cuando,portando mi uniforme militar,caminaba por las calles de Maimana,donde mucha gente mayor (viejos combatientes) me concedían la gentileza de ponerse de pie y hacer el saludo militar.

Se debe pedir permiso a la gente para hacer fotografías. Es prohibido a los hombres fotografiar a las mujeres. Sonarse la nariz delante de la gente està prohibido.Tampoco se puede,estando sentado en una silla,mostrar las suelas de los zapatos a los presentes en la reunión.Tampoco se debe apuntar con el dedo índice a alguien mientras se le habla. Las mujeres no pueden mostrar los brazos y las piernas.Tampoco pueden tener un contacto visual prolongado con los hombres.

En la escena pública las mujeres no aparecen,salvo los días de mercado. (En Maimana eran lunes y jueves). Se puede ver mucho contacto físico entre los hombres, demostraciones de afecto tales como sentarse en las rodillas de otro hombre, o caminar dos hombres tomados de la mano y sus mujeres tres pasos detrás. ¿Son demostraciones de homosexualidad? Con un criterio simplista y atendiendo solo lo genital sin considerar lo afectivo,la conclusión puede ser afirmativa,pero al mismo tiempo equivocada. Sin ser especialista en sexualidad, intuyo que aùn en los heterosexuales las muestras de afecto pueden seguir los más diversos e insospechados caminos.

Las demostraciones de religiosidad son también inusuales. Observè la devoción de los “pashtun” practicando sus oraciones a la caída del sol. (lo hacen cinco veces al dìa,siguiendo las normas islàmicas). Impacta lo sagrado del momento. ¿Es fervor religioso o fanatismo? No hay una respuesta contundente a tan complicado asunto. Un afgano se inmolò frente a la sede de ONU en Mazar –e-Shariff.Se rociò con nafta y “se prendió fuego”. ¿Qué motivaciones impulsan a estos suicidas?. Los expertos en Criminologìa niegan competencia en este dilema y lo pasan a la Psiquiatría, pero èsta lo devuelve a la Criminologìa. Los “ulemas” (expertos religiosos) me sugirieron hurgar en la Teología, pero èsta es vista con desdén en Occidente.Segùn he leído, solo Baruch Spinoza intentò explicar dilemas terrenales empleando conocimientos teológicos siguiendo el método de Descartes.Spinoza fue expulsado de su comunidad por “hereje”.

Pude observar costumbres rurales. De camino a Gurziwan, un districto de la provincia encerrado en las montañas,hicimos un alto durante el viaje para ver unos agricultores cosechando trigo.Sus tècnicas y herramientas de trabajo han permanecido incambiadas desde hace cinco mil años.Las familias se instalan en el lugar y levantan una pequeña carpa. El agua la llevan en baldes metàlicos forrados de madera.Los niños son los encargados de esta tarea y usan un burrito para transportarla.

Amanecía.  Una familia tomaba el desayuno,compuesto de carne de cabra hervida y cebollas crudas. Despuès del desayuno comenzò la siega, interrumpida a mediodía para almorzar. Las mujeres prepararon “palao”, acompañado con pan y té. Agregaron uvas, melones y sandías. La jornada se prolongò hasta la caída del sol.Las condiciones de trabajo son muy difíciles, a lo que se suma el peligro de las minas sembradas durante las guerras.

El afgano no vive, apenas sobrevive. El apremio de comer todos los días no le deja tiempo libre para pensar en otros temas, pero la aplicación de sus normas y costumbres sociales los fortalece y les permite paliar los pesares de la vida.

Por el Coronel ® Tilio Alberto Coronel Grillo
CI 280JOE2 628 6
Ejército Nacional. Retirado 18 de mayo de 2009 /Presté Servicios como Observador Militar de Naciones Unidas en el SAHARA OCCIDENTAL ( 17 SET 1996 -17SET 1997), TIMOR ORIENTAL ( 2 AGO 2002 -2AGO 2003),REPÚBLICA ISLÁMICA DE AFGANISTÁN ( 26 MAR 2005 -26MAR 2006)

 

(Síganos en TwitterFacebook)
INGRESE AQUÍ POR MÁS CONTENIDOS EN PORTADA

Las notas aquí firmadas reflejan exclusivamente la opinión de los autores.