Ha muerto Geza Stari mi amigo y compañero de lucha. No conocí a Geza de toda la vida, antes del año 1975 nos habíamos cruzado muchas veces desde la militancia gremial, él como docente y dirigente de la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria, yo como militante de la FEUU; pero solo en una ocasión habíamos mantenido una breve conversación.
Pero luego de junio de 1975 nos vimos o nos comunicamos casi todos los días durante 9 años en Buenos Aires, donde los dos habíamos pasado a vivir por indicación del Partido Comunista, y de la UJC en mi caso. Repentinamente la lucha contra la dictadura uruguaya y nuestros ideales políticos nos habían juntado para un “viaje” que a los dos -al principio- nos parecía iba a ser más breve. El Partido Comunista lo nombró responsable de dirigir un equipo en la clandestinidad que permitiera el enlace entre el Secretario del Partido Rodney Arismendi en el exilio y el centro de dirección del PCU en Uruguay. Durante todos esos años casi dia y noche militamos junto a muchos compañeros para cumplir esa responsabilidad.
Hoy se conoce bastante lo que era por esos días la Argentina con la dictadura de Videla y su “Junta de Comandantes Generales”. Si Dante la hubiera vivido seguramente no lo escribiría una vez sino cien: “Abandonad toda esperanza, aquellos que entréis aquí”. Por el contrario Géza lo que nunca abandonó fue la esperanza y un envidiable coraje que mantuvo junto al miedo y la angustia, propia de quienes son conscientes del peligro que corren.
Desde ese lugar hubo que defenderse de dos dictaduras simultáneamente. Su entrañable compañera Raquel y su pequeña Cecilia nunca por esos años sacaron todas las pertenencias personales de unas pocas valijas que tenían; cuando pensaban en ello ya había que mudarse de nuevo, de casa, de barrio, de nombre y en lo posible de cara.
Para poder llegar a cumplir con las tareas encomendadas por el Partido desde ese escenario llegamos a conocernos de memoria casi todas las calles, pasajes, Bares, Clubes o Centros Sociales de Buenos Aires y otras ciudades Argentinas.
Sin exagerar ni un milímetro, por Geza pasaron casi todos los avatares de la lucha de los comunistas uruguayos contra la dictadura, la clandestinidad, la cárcel y los dirigentes en el exilio. Llegó un momento que por su responsabilidad durante tantos años este entrañable jefe llegó a conocer y dominar la historia política organizativa y humana más completa de los comunistas y frenteamplistas por aquellos años.
Fueron muchas las horas, días y años en que compartí con él discusiones, opiniones políticas, humanas y todas las otras que puedan existir; no pocas veces logramos ponernos de acuerdo, nunca lo escuche o vi actuar sino como el más modesto, parco, inteligente y humano profesor que lo era. En esas circunstancias lo único que me hacía sentir incómodo y preocupado era cómo se rascaba desesperadamente su persistente psoriasis.
A su regreso a Montevideo continuó siendo hasta el año noventa integrante del Partido Comunista y miembro de su Comité Central, más recientemente se sumó a la Alianza Progresista. Su continuo compromiso social y gremial lo llevó desde mayo del 2006 y durante 5 años a ser el representante de los Jubilados y Pensionistas en el Directorio del Banco de Previsión Social.
Por estos días he escuchado que Geza Stari es uno de los héroes anónimos de la lucha contra la dictadura. No comparto esa afirmación. Lo que sí existe es una persistente y extendida actitud ya transformada en cultura negadora de héroes como Geza. Es el mismo signo de lectura de la historia reciente que cada 20 de Mayo se olvida que en Buenos Aires también en esa época fue secuestrado y seguramente asesinado el Dr. Manuel Liberoff, y que el 24 de diciembre de 1974 asesinaron a Raúl Feldman, otro comunista.
Por Roberto Pereira
La ONDA digital Nº 729 (Síganos en Twitter y facebook)
(Síganos en Twitter y Facebook)
INGRESE AQUÍ POR MÁS CONTENIDOS EN PORTADA
Las notas aquí firmadas reflejan exclusivamente la opinión de los autores.
Otros artículos del mismo autor: