El desnudavirus

Coronavirus? Si, pero es un virus cuya ocurrencia ha servido para desnudar todas las contradicciones del sistema que nos ha tocado soportar. Las grandes y obvias como que los que han ido pagando el pato son los de siempre, los más desamparados. Los sistemas de salud que no han podido dar el soporte adecuado. Las redes de corrupción que han aprovechado la desgracia de los demás para lucrar. Los gobernantes aventureros desparramados por el primero, el segundo y el tercer mundo que sin importar cuántos se mueran proclaman que hay que llegar rápido al momento de relanzar la economía.

Y las no tan obvias como las esencias de la visión del mundo de los que reclaman que su libertad individual está por encima de la salud social. Como se hacen evidentes las podredumbres egoistas de esas visiones en donde los demás no importan, sólo el yo. Ha desnudado la inconsciencia de gente haciendo fiestas, la tontería de los negadores que sostienen que todo esto es un invento. Desnudó cuán poco importa el capital en este mundo y cuánto importa el trabajo para que todo funcione.

También ha quedado a la vista que tan rápido se podría recuperar el agua y el aire a poco de que dejemos de exprimirlos al máximo (el calentamiento va a llevar un poco más de esfuerzo)

He escuchado varios expresiones de deseo manifestando la esperanza de que cuando todo esto pase, el mundo cambiará para mejor. Y lamento creer que no. Que este desnudamiento de todo lo que es malo para la humanidad no hará más que ser un episodio epidemiológico. Una cifra más.

Discúlpeseme la resignación.

Por Gustavo Negro

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