Virología de la Facultad de Ciencias es fundamental que continuemos quedándonos en nuestras casas

Información publicada inicialmente por
Hébert Dell’Onte Larrosa «TodoElCampo»

La lucha contra el Covid-19 recién comenzó en Uruguay, estamos en el primer round, apenas esquivamos un par de ganchos pero tenemos la sensación de que la pelea está ganada. Sin embargo, si nos descuidamos, en el en el segundo round nos pueden knockear. Por lo tanto es fundamental que continuemos quedándonos en nuestras casas. Ese es el eje fundamental del mensaje publicado el martes en la cuenta de Twitter Virología Fundamental-FCIEN (@VFcien) de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República.

Los científicos que manejan esa red publicaron una advertencia grave a la que todos debemos prestar atención, en especial en estos días en que parece que todos hemos bajado la guardia, como si tuviéramos la batalla ganada. Pues no. La batalla recién empieza y estamos lejos del triunfo, y con actitudes equivocadas caminaremos rápidamente hacia el fracaso, un extremo que no queremos, porque hemos visto qué sucedió en aquellos países del primer mundo, con excelentes hospitales, con economías más fuertes y presupuestos más sólidos. Ni los buenos hospitales, ni las economías fuertes, ni los presupuestos en salud sólidos han servido si antes, como medida básica, las personas no se han cuidado de la forma más elemental: quedándose en sus casas.

EL HILO DE TWITTER.
Los científicos publicaron un interesante hilo en la cuenta @VFcien. Comenzaron comparando la lucha que la sociedad uruguaya lleva a cabo contra el coronavirus Covid-19 con un combate de boxeo. Gráficamente señalaron que este es un “combate de boxeo a varios rounds” en el cual “hoy Uruguay está recién en el primero. Hemos esquivado un par (solo un par) de cross (ganchos) y sin embargo hay una sensación de que la pelea está ganada”, pero eso no es así, “#QuedateEnCasa!”, porque “nada cambió” en este mes y algunos días que llevamos lidiando contra el virus.

Y explica por qué: “Al mes de iniciada la pandemia, Uruguay ronda los 500 casos. ¿Pero es éste el número real de casos? –se pregunta. “No. Claramente no. Hay mucho más. ¿Cuántos más? No sabemos. Todos los países tienen ese problema: el subregistro”, algo que ocurre por “varias razones”, algo que Virología Fundamental de la Facultad de Ciencias (VFcien) no se detiene a analizar porque el motivo de alerta es otro.

“El hecho de que los casos graves en Uruguay no se hayan disparado puede ser una buena señal, si bien ellos son aproximadamente entre el 5-15 % del total de casos. Es la punta del iceberg que podría ser reflejo de la masa total de hielo. Si es así, es muy bueno. Hay que confirmarlo”, señala.

La pregunta es cómo se reduce todo cuanto sea posible ese subregistro. La forma es “testeando más y mejor.  Los países más exitosos realizan 250-300 tests/día/millón de habitantes, sumado al rastreo y aislamiento estricto de casos. Uruguay debería hacer entre 800 y 1.000 tests al día y tenemos la capacidad para hacerlo, pero aún falta”.

LA TRAMPA INQUIETANTE.

Ahora bien, dando por real que el subregistro “es bajo (y aunque fuera moderado), la existencia de tan pocos casos y una curva realmente chata, deja al descubierto una trampa inquietante” y es que “todavía 99 de cada 100 uruguayos son susceptibles” al Covid-19.

Eso “significa que si relajamos las medidas restrictivas, en el segundo round (seguramente lo haya) nos pueden knockear”.

Además necesitamos saber que el SARS-CoV-2 (la versión mejorada del SARS y que causa el Covid-19) “tiene un aliado que jugará un papel central si no nos cuidamos: los pacientes asintomáticos o presintomáticos” que son “un 15-20 % de los infectados y trasmiten el virus tanto como los sintomáticos. Es como boxear con los ojos cerrados: no sabremos de donde vienen los golpes”.

Cabe aclarar qué es un paciente asintomático y qué un paciente presintomático. Los los primeros son aquellos que no llegan a desarrollar síntomas de la enfermedad pero pueden transmitirla, mientras que los segundos la transmiten antes de haber desarrollado los síntomas.

ESTAMOS IGUAL QUE EN EL DÍA CERO.
“Por todo esto, una de las principales razones para #QuedateEnCasa” es que “estamos igual que al principio. Si, igual. 8 fallecidos es la triste diferencia”, destaca VFcien, y si hasta ahora “la curva  de casos en Uruguay no fue exponencial”, en parte se debe a “nuestro compromiso de #achatarlacurva”. Ello no lleva a la deducción de que si nos descuidamos nuestro éxito transitorio se convertirá rápidamente en un fracaso.

Por eso debemos continuar en cuarentena, no hay “ninguna razón” para comportarnos de manera diferente.

“Ya habrá tiempo de pensar y diagramar la flexibilización general de la cuarentena, basada en evidencia y en criterios científicos-médicos-sanitarios-económicos. No ahora. No para todos, al menos. No hay razones para que resolvamos la ‘autoflexibilización’. Ninguna razón”, enfatiza VFcien.

SI BAJAMOS LA GUARDIA, PODRÍA HABER UN EFECTO REBOTE.
Cerrando el hilo, los científicos señalan que aún “falta recopilar y cruzar mucha información” y se debe “avanzar en la investigación científica referida a aspectos inmunológicos, virológicos y médicos” para poder establecer si hay inmunidad en aquellas personas que sufrieron la infección y se sanaron, saber si es posible la reinfección. Son preguntas que la ciencia debe responder. “Hay algunos datos, pero aún sabemos muy poco”.

Ante las situaciones presentadas, Virología Fundamental de la Facultad de Ciencias insiste: “bajar la guardia puede tener un efecto rebote en el segundo ‘round’ y todo lo bueno hecho hasta aquí habrá sido en vano. Si podés #QuedateEnCasa y en otro hilo te contamos qué estrategia usarán algunos países para salir del #Lockdown” (en encierro), concluye.

Hébert Dell’Onte Larrosa «TodoElCampo»

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