Susanne Dahlgren; Irán e Israel no quieren en principio una guerra a gran escala

Susanne Dahlgren que dirige el Instituto Finlandés de Oriente Medio subraya que Irán e Israel no quieren en principio una guerra a gran escala. Sin embargo, la situación puede empeorar sin control. Desde hace unos días se esperaba una escalada de la explosiva situación en Oriente Medio . Irán ha prometido vengar el ataque de Israel a Teherán el miércoles, en el que murió Ismail Haniyya, líder político de la organización extremista Hamas . Israel ha negado estar detrás del ataque.

El aliado de Irán, la organización extremista libanesa Hezbollah, por su parte, afirmó que lanzó decenas de cohetes contra Israel la noche del sábado al domingo. Ha amenazado con atacar profundamente a Israel.

Los rebeldes hutíes de Yemen también atacaron un barco en el Golfo de Adén durante el fin de semana y afirmaron haber derribado un avión estadounidense en la parte noroeste del país.

Israel, por ejemplo, ha puesto a su fuerza aérea en alerta máxima en caso de ataques de Irán y sus aliados, informa el medio israelí Haaretz .

El principal aliado de Israel, Estados Unidos, por otra parte, ha anunciado que enviará más buques de guerra y aviones de combate a la región. Muchos países occidentales han instado a sus ciudadanos a abandonar el Líbano y evitar viajar a Israel.

Junto con Susanne Dahlgren , directora del Instituto Finlandés de Oriente Medio, el EI analizó cuatro escenarios sobre cómo podría evolucionar la delicada situación en Oriente Medio.

Escenario 1: Estalla una guerra más amplia entre Israel e Irán
Si Irán o sus aliados llevan a cabo un ataque contra Israel, en el que muere un número significativo de civiles, la situación podría desembocar en una guerra más amplia mediante una escalada incontrolada, estima Dahlgren.

El sábado, The Wall Street Journal informó, citando sus fuentes, que se había enviado una advertencia a Irán sobre la disposición de Israel a ir a una guerra a gran escala si Irán o Hezbollah atacan la ciudad de Tel Aviv o se adentran profundamente en Israel.

Mucho dependería específicamente de la respuesta de Israel si fuera golpeado; en el peor de los casos, podría iniciar un ciclo de escalada del cual no habría retorno.

Estados Unidos también podría formar parte de esa escalada.

Los estadounidenses y, entre otros, los países implicados en las negociaciones sobre la guerra de Gaza, es decir, Egipto y Qatar, intentan por todos los medios evitar el estallido de una guerra más amplia, afirma Dahlgren.

Si estallara una guerra, Hezbollah y los rebeldes hutíes de Yemen probablemente también estarían involucrados. El sábado, Hannu Juusola , profesor de estudios de Oriente Medio en la Universidad de Helsinki, evaluó para el EI que el posible ataque de represalia de Irán contra Israel podría incluir, además de los ataques aéreos, un ataque terrestre de Hezbollah.

Por ejemplo, The Times estima que una guerra que involucre a Irán, Hezbollah e Israel sería muy costosa, especialmente para los dos últimos. Sólo Hezbollah tiene un arsenal de 150.000 misiles, y el terreno montañoso del Líbano no sería un entorno de combate misericordioso.

Hezbollah también tiene un ejército de al menos 50.000 combatientes y una extensa red de túneles en el sur del Líbano, escribe The Times. Con su fuerte aliado, proporcionaría a Israel un rival significativamente más fuerte que Hamás. Irán, por el contrario, teme que una guerra a gran escala en Oriente Medio pueda provocar un levantamiento en el país, afirma Dahlgren. Según Dahlgren, Irán tampoco está dispuesto a sacrificar a sus aliados, como Hezbollah.

Por lo tanto, una guerra a gran escala no redundaría en beneficio de Irán ni de Israel, señala Dahlgren.

– Los hutíes son en realidad el único partido en Oriente Medio que espera que estalle una guerra. Para ellos, el conflicto es una forma de mantenerse en el poder. Israel e Irán quieren evitar una guerra más amplia. Aunque la oposición iraní está fragmentada y en gran medida en el extranjero, el régimen clerical tiene en mente la amenaza de un levantamiento, resume Dahlgren.

Escenario 2: Irán ataca a Israel sólo una vez
El 13 de abril, Irán y sus aliados llevaron a cabo un ataque aéreo contra Israel con misiles y drones. En Oriente Medio «se rieron» del ataque, afirma Dahlgren.

Se habló de teatro porque Irán anunció el ataque con dos horas de antelación. Es difícil imaginar que Irán vuelva a poner en riesgo su reputación con un golpe similar. Creo que habrá algo más ahora.

Si Irán ataca a Israel en los próximos días, Israel podría ser capaz de evitar un fuerte contraataque a través de la diplomacia. Esto también depende de la naturaleza del ataque de Irán, explica Dahlgren.

Por otro lado, también podrían iniciarse negociaciones en dirección a Irán, lo que ayudaría a poner fin a la serie de ataques. Estados Unidos jugaría el papel más importante aquí.

Muchos países han expresado esperanzas de que Irán e Israel no emprendan ese ciclo de venganza. A Irán también se le podría ofrecer una zanahoria, por ejemplo, reiniciando las negociaciones sobre armas nucleares. Su nuevo presidente, Masud Pezeshkian, ha dicho que Irán podría volver a la mesa de negociaciones.

En 2018, el expresidente estadounidense Donald Trump sacó a Estados Unidos de las negociaciones nucleares con Irán, cuyo objetivo era establecer límites al programa de armas nucleares de Irán. El actual presidente Joe Biden no ha reiniciado las negociaciones.

Estados Unidos y la Unión Europea han impuesto fuertes sanciones económicas a Irán, que Irán espera eliminar.

Escenario 3: Irán ataca más tarde, pero mejor preparado
Dahlgren considera que un escenario en el que Irán realice un ataque fuerte y bien planificado contra Israel probablemente sólo después de una mejor preparación.

– Estados Unidos asesinó a Qassem Suleiman , líder de la Guardia Revolucionaria iraní , en enero de 2020. Luego Irán esperó mucho tiempo con su ataque de venganza. Muchos sospechan que el ataque de Hamás a Israel en octubre fue en realidad una venganza por el asesinato de Suleiman, describe Dahlgren.

Ahora se están llevando a cabo interrogatorios en Irán sobre el asesinato del líder de Hamas, Ismail Haniyya, mencionado anteriormente. Si Irán prepara su venganza para más tiempo, primero quiere investigar el asunto a fondo.

– Irán tiene un lugar para dar explicaciones en dirección a Hamás. Su servicio de seguridad fracasó cuando Haniyya fue asesinado en Teherán. Es vergonzoso para Irán, afirma Dahlgre.

Escenario 4: Las tensiones entre los países se alivian
Según Dahlgren, la tensión de décadas entre Irán e Israel no puede finalmente disminuir hasta que se resuelvan la guerra en Gaza y la cuestión palestina más amplia.

Por lo tanto, considera improbable un escenario en el que la grave situación entre ambos países se calme rápidamente. La reducción de la tensión requeriría el fin de la guerra de Gaza por parte de Israel y Hamás, y el consentimiento de Israel al establecimiento de un Estado palestino, dice Dahlgren.

– La tensión la provoca la guerra en Gaza. Allí se necesita una tregua para que el resto de la tensión pueda disminuir. Mucho está en manos de Israel y, por supuesto, también de Hamás. La guerra en Gaza ha sido una situación horrible y trágica para los palestinos, como lo fue para Israel el ataque de octubre de Hamás, enumera Dahlgren.

Por otro lado, Irán no acepta a Israel y a Estados Unidos como potencias en Medio Oriente. Estados Unidos todavía tiene un enorme potencial como posible mediador de paz.

– Estados Unidos está armando a Israel, y la amenaza del fin de la ayuda armamentista podría darle impulso a Israel. Por otro lado, Estados Unidos tiene una gran influencia sobre Irán en forma de sanciones y negociaciones nucleares.

La cuestión palestina y la seguridad de Israel son «cuestiones que duran una década», afirma Dahlgren. Por tanto, es difícil ver una solución para ellos, al menos en la situación política actual.

– Si la comunidad internacional quiere que los acontecimientos actuales no se repitan, entonces hay que ayudar en la medida de lo posible a la cuestión palestina e Israel debe aceptar la creación de un Estado palestino. Ahora hay fuerzas en el poder en el país que no quieren ningún tipo de Estado palestino, afirma Dahlgren.

Informe de Juho Pitkänen para Is.fi/de Finlandia

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