Documento del FA; para iniciar los procesos de balance y autocrítica que no podemos ni debemos eludir.

Tiempo de lectura: 6 minutos

 

Documento elaborado por Grupo de Trabajo del Secretariado Ejecutivo del Frente Amplio
1. Las elecciones nacionales de este año determinaron que se interrumpiera el ciclo de gobiernos frenteamplistas en el Uruguay. Luego de tres períodos consecutivos, un poco más de la mitad de la ciudadanía decidió que debía cambiar el gobierno. Este hecho no nos debería tomar por sorpresa ya que desde hace un buen tiempo se percibía cierto desgaste de la opinión pública respecto de la gestión frenteamplista. Asumir esta realidad resulta fundamental para iniciar los procesos de balance y autocrítica que no podemos ni debemos eludir.

2. La autocrítica deberá ser el camino que nos guíe para poder plantarnos de cara al futuro, pero este deberá ser acompañado con el mayor sentido de unidad. El Frente Amplio sigue siendo al día de hoy un ejemplo a seguir para la izquierda mundial por su madurez y capacidad para
preservar la unidad de acción apoyada en la diversidad de pensamiento, y eso lo debemos preservar. Nuestra fuerza política es la síntesis de la conjunción de fuerzas democráticas anti oligárquicas, antiimperialistas y antipatriarcales, y ha logrado, mediante la acción política permanente y la más amplia participación de nuestro pueblo construir un programa de cambios con centro en las más diversas luchas populares. Por la forma de construcción de su programa y por el carácter del mismo, el Frente Amplio es mucho más que una herramienta para el mero acopio de votos.

3. El proceso de balance al que nos referimos debe desarrollarse sin perder de vista el enorme desafío que la fuerza política tiene de cara a mayo, en el que mantener los gobiernos departamentales donde ya se gobierne, y conquistar las intendencias y municipios que se puedan conquistar deberá hacerse con propuestas programáticas de cercanía que rescaten el vínculo con los territorios en donde se expresará la resistencia de lo conquistado frente al avance del modelo conservador.

4. Una aproximación razonable hacia tal proceso no puede empezar sino por caracterizar, aunque sea sintéticamente, nuestros desaciertos de forma de reconocerlos y transformarlos con ojo crítico en perspectiva estratégica y propositiva. Resulta imperativo por esto recuperar nuestra iniciativa política e impulsar el debate ideológico que enfrente en todos los planos a nuestros adversarios. Gran parte de lo político se juega en la subjetividad, en las emociones, en el plano de lo cultural. La política no es una subdisciplina de la administración. Las luchas políticas se ganan con narraciones, identidades, entusiasmo, proyectos que trasciendan, disputa y construcción de hegemonías; buscando cambiar condiciones subjetivas que deben pensarse y articularse estratégicamente. Hay que politizar este debate. En todos lados se expresan relaciones
de poder; cuando algo no está politizado es que el poder no está explícito y por lo tanto no se puede combatir.

5. Aún hoy, desde la oposición, el desafío estratégico sigue siendo la realización de reformas estructurales, democráticas – populares, que tengan como objetivo modificar la concentración de los ingresos, de la propiedad y del poder. Nuestra propuesta está en el Programa del Frente Amplio que más de un millón de uruguayos y uruguayas respaldaron el pasado 24 de Noviembre. La perspectiva de continuar el camino de la transformación de la sociedad reduciendo las desigualdades y ampliando los derechos para bienestar de todas y todos, requiere
actualizar la lectura de la sociedad y la política, efectuando una mirada autocrítica como condición para ser exitosos en esta nueva etapa. Debemos reflexionar sobre uno de los aspectos de esta contraofensiva de la derecha que ganó el gobierno, y es haber logrado poner a la izquierda y al movimiento popular a la defensiva. El discurso fue tendiente a convencer de que el proyecto de Frente Amplio estaba agotado, pero también nuestros propios errores han contribuido a esta situación. Las acciones de lucha que desarrollamos, aún las exitosas, la mayor parte de las veces estuvieron dirigidas solamente defender lo conquistado. Si el discurso de la derecha fue ayer el del fin de la historia y las ideologías, hoy pretenden instalar el del fin del ciclo progresista. En cada iniciativa y frente donde las políticas del gobierno electo signifiquen un retroceso o amenacen los derechos que con tanto esfuerzo todas y todos hemos logrado, allí estará esta fuerza política, con ideas y movilización para seguir construyendo una democracia más plena.

6. La campaña que concluyó en las últimas semanas se mostró, por momentos, errática y carente de conducción. Más allá de la voluntad y buenas intenciones, a nadie se le escapa que el incansable  trabajo y esfuerzo de miles de militantes fue el aspecto más destacable de la misma. Pero esa militancia, ese “dejar todo en la cancha” no fue ni casual ni espontáneo. Fueron cientos de actividades llevadas adelante en los barrios por comités de base, coordinadoras y departamentales, fue la Campaña de Cercanías, las Asambleas del 25 de Agosto, la histórica jornada de las 100 mil Visitas, las vibrantes iniciativas de las Redes Frenteamplistas y el
compromiso demostrado de diversos Colectivos que confluyeron en la gesta política del Voto a Voto. A ese compromiso demostrado debemos retribuirlo sumando acciones para corregir rumbos en las próximas elecciones departamentales y municipales.

7. Debemos analizar, asimismo, qué papel cumplieron las Comisiones Centrales de Organización, Finanzas y Comunicación – Propaganda, cómo desplegaron sus tareas en coordinación con la candidatura, y si pudieron llevar adelante su rol de articulación y otorgar a la potente estructura de nuestra coalición – movimiento los insumos necesarios para enfrentar la campaña electoral con eficacia y eficiencia en la administración de los diversos recursos (políticos, humanos y financieros).

8. Sería sensato profundizar, con estudio y con debate, en las motivaciones que llevaron a una mala valoración de parte de la ciudadanía de la gestión frenteamplista, asumir con mucha modestia los yerros, y desterrar todo atisbo de autocomplacencia pues las deudas sociales son muchas y la lucha siempre tiene una mañana siguiente. En esta reflexión también deberá de haber espacio para la discusión sobre la relación entre gobiernos y fuerza política, pues la participación amplia y profunda de ésta en los procesos de toma de decisión resulta clave para la defensa de la acción gubernamental. Asimismo, hemos asistido a desfasajes entre el papel que debería jugar la dirección de la fuerza política y el trabajo e iniciativas de movilización de los militantes en el
territorio que nos deben llamar a la reflexión en tanto dificultaron el trabajo cotidiano de la construcción de síntesis política con la gente.

9. Cabe, por último, destacar y considerar que esta fuerza política y su conducción asumieron el compromiso a mediados del 2017 de llevar adelante una Estrategia Política que incluía dos objetivos. Uno de ellos era conquistar el cuarto gobierno nacional, nuevos gobiernos departamentales y municipales dando paso a una consolidación de las transformaciones logradas hasta el momento. El otro incluía lineamientos para relanzar un proceso de acumulación social y política, avanzar en objetivos fijados por el Programa del FA y fortalecer y ampliar el bloque social y político de los cambios. Por delante tenemos la posibilidad de disputar gobiernos del
nivel subnacional, pero es evidente que existen razones para creer que no fuimos exitosos en la concreción de varios de los objetivos planteados y esto también ha de llamarnos a un profundo análisis de causas, desde dónde explorar las perspectivas y propuestas para un cambio.

10. Para que este proceso sea constructivo, urge establecer con claridad las etapas y formas de
análisis y trabajo político que se abren. De esta manera, proponemos:

a. Que el Plenario Nacional convocado para el 21 de diciembre es el comienzo de este proceso que ha de ser gradual, profundo y fraterno, cimentado en la más amplia participación del pueblo frenteamplista y a lo largo del segundo semestre del año 2020.

b. De forma de incrementar la calidad de la participación y permitir profundizar en la discusión, al mismo tiempo que se le da espacio a los colectivos que se incorporaron, se propone considerar la modalidad de talleres que culminen en asambleas, la discusión en nuestra estructura orgánica incluida la convocatoria a un gran encuentro de comités de bases, los aportes sectoriales y otros, siempre y cuando traten los grandes ejes del proceso: evaluación de los gobiernos, evaluación de campaña, relación fuerza política – gobierno – movimientos sociales, estructura y funcionamiento de la fuerza política.

c. El fortalecimiento del Frente Amplio como herramienta política, como el espacio donde se sintetiza y se proyecta el proceso de acumulación social y política es esencial para proseguir el camino de las transformaciones. La capacidad de construir una síntesis política y programática que se traduzca en la imprescindible unidad de acción, es un principio estratégico de todas y todos los que somos parte de este proyecto; en el convencimiento de que más allá de nuestras diferencias, tenemos un denominador común que nos interpreta y aglutina: un compromiso inclaudicable con las causas populares. Como dijo el General Seregni el 26 de marzo de 1971: “el Frente Amplio es el legítimo heredero de la tradición artiguista y de ella toma sus banderas y su ideario”.

Esta construcción ha sido colectiva y hay miles de hombres y mujeres que han sido protagonistas en la misma. El aporte de todas y todos a este proceso será recibido y sintetizado en un documento que deberá ser validado por la Mesa Política y elevado nuevamente al Plenario Nacional.

d. Se propone, asimismo, que el Plenario Nacional considere y apruebe este documento que deberá incluir una estrategia y un plan de acción política para enfrentar los cuatro años de gobierno por delante en nuestro rol de oposición, y que ya se fije oportunamente la convocatoria a elecciones internas del Frente Amplio, de manera de concluir este proceso con una renovación de su dirección política.

Montevideo, diciembre 2019

 

 

La ONDA digital Nº 934 (Síganos en Twitter y facebook)

(Síganos en TwitterFacebook)
INGRESE AQUÍ POR MÁS CONTENIDOS EN PORTADA

Las notas aquí firmadas reflejan exclusivamente la opinión de los autores.