El gobierno del Dr. Lacalle Pou y su estrategia comunicacional

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 PROHIBIDO DECIR “NO” O USAR EXPRESIONES NEGATIVAS

Es muy interesante analizar la forma de la comunicación de estos nuevos gobiernos de derecha. No soy comunicadora, ni experta en esto, solo es mi observación.

Si se fijan nadie dice NO. Desde el presidente para abajo. Nunca «por la negativa». No se usan palabras que denoten negatividad:

¿La rebaja salarial? Es ajuste.

¿La suba de las tarifas? Es adecuación

Toda un ingeniería comunicacional. Para estos nuevos populismos de derecha, el tema de la comunicación es estratégica, y la retórica es un pilar fundamental. Pues con ello esconden la verdadera acción política, que es contraria a los intereses y beneficios de las y los más necesitados y de las inmensas mayorías. Aunque utilizan la oposición, élites – pueblo, cómo cualquier populismo para llegar a las masas, aquellas que tienen menor formación, pero sobre todo desarrollo de pensamiento crítico y capacidad de análisis, las que pueden ser manipuladas con «amenazas» externas.

En Europa es clarísima la utilización de los migrantes, para obtener sus objetivos. En esta parte, lo han sido los grupos neopentecostales, «la ideología de género», como un invento que refuerza, pero también las nuevas clases medias que lograron con gobiernos de izquierda o progresistas trabajo y desarrollo y consiguieron un bienestar, relativo. Auto, casa, vacaciones, sus hijos estudios, etc. A estás les crearon un «enemigo», el vago, que recibe prestaciones sociales. Les machacaron que ellos trabajan, se esfuerzan, haciendo una carrera, incluso Masters y esos están tirados debajo de un árbol, drogándose.

Claro, si una no tiene capacidad de análisis y nadie te dice que pudo hacer todo eso porque había un gobierno que decidió invertir en la gente, es decir, en ellos y ellas, creen que siempre estuvieron esas posibilidades, UTUs en el pueblo, Universidades, trabajo, hospitales de primera, etc. Mi abuelo siempre decía «… no tiene la culpa el chancho, sino quien le rasca el lomo…»

La forma de esta comunicación tiene un clarísimo ejemplo: cerraron refugios para la gente en situación de calle, y luego abrieron 500 cupos. Con un aparato comunicacional reiterando lo positivo, los «500 cupos nuevos».

¿Qué queda en la mayoría de la gente? Hay más gente en situación de calle, que es cierto, pero estos son buenos abrieron «más» refugios.

De esa manera manipulan y contienen el descontento, por lo menos al principio. Hasta que las mayorías empiezan a darse cuenta a fuerza de carencias y necesidades no resueltas. Para ese entonces también estarán muy desprestigiadas y venidas a menos las organizaciones tradicionales de los trabajadores y otros sectores, entonces aparecen los estallidos muy válidos, pero sin orientación y sentido unido como en otras épocas. Esto se ha dado en Europa, en Chile, en otros lugares.

Nada nuevo lo que nos sucede aquí, es parte del libreto universal del capitalismo y expresión de estás «nuevas» derechas, más corridas a la derecha y capaces de aliarse con los sectores de ultra derecha, fascistas y nazis. El objetivo general es siempre el mismo, concentrar poder y riquezas en las élites.

En lo que va de la pandemia los ricos son más ricos y el resto solo mírense. Me quedó largo, pero no se puede reflexionar en 144 caracteres, eso también es parte de no razonar.

Por Liliana Pertuy
Socióloga

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