El Periodismo es grande. Cada periodista ¿no es un regulador del mundo, si lo persuade? Thomas Carlyle (1795- 1881) Historiador, pensador y ensayista inglés // Se le ha atribuido a la prensa esta caracterización. Compite con los tradicionales poderes republicanos. Ejecutivo, Legislativo y Judicial. La diferencia fundamental está en que funciona sin ser un poder formal del Estado y sin embargo actúa e influencia en los otros tres de manera decisiva.
La falta de regulación deja librada la comunicación al mercado. Éste, funciona con la influencia de quien más dinero tiene, por tanto, detrás del famoso Cuarto Poder, siempre terminan predominando las voces privilegiadas.
Creo que el impacto de la imprenta de Gutenberg primero y la interconectividad mundial hoy han democratizado sin dudas el alcance de la información. Conocemos sobre sucesos en el mundo casi al instante. Las redes sociales se encargan de abrir comentarios multiplicadores que lo definen, describen, caracterizan, en una especie de gran foro de debate permanente.
Así entonces, desde mi propia casa, sentado frente a una computadora soy capaz de informarme y opinar con fervor sobre casi todo…”qué fácil es protestar por la bomba que cayó a mil quilómetros del ropero de mi refrigerador” cantaba desde hace mucho Silvio Rodriguez ….. mi comodidad es tal, que hasta opino sobre los sucesos que pasan en la esquina de mi casa, sin molestarme en ir a ver qué pasó.
Mi licenciatura en derrotas me ha hecho rico en experiencias, conversando sobre esto, Platero, el viejo dirigente sindical de Adeom, me decía, siempre es mejor aprender ganando, duele menos.
En este recorrido de poder mediático, experiencias y licenciaturas me encontré en pocos días con discusiones de enorme impacto, casi con los mismos protagonistas pero con contenidos sustancialmente distintos.
La divulgación de datos sobre la situación financiera de Ancap, trajeron a primer plano la política llevada adelante por el Frente Amplio en los Entes. Pegado a ello las responsabilidades de quienes la condujeron fue juzgada, opinada y sobre todo laudada, por los medios y por nosotros desde nuestras computadoras.
Sin quitarle valor a la opinión de nadie, el sesgo de cómo se discutió el asunto condicionó claramente la síntesis.
Por lo menos en mi opinión, la política de los Entes estuvo orientada desde la mirada frenteamplista de los mismos. A lo largo de nuestros gobiernos y en contraposición a la mirada privatizadora y neoliberal, nuestro pequeño país ha cambiado una larguísima tendencia de declive por políticas que fortalecieron a nuestro Estado, a nuestra economía y por cierto favorecieron a un porcentaje infinitamente más alto de nuestra población.
Es francamente saludable que los errores o insuficiencias sean públicos. Tanto como la búsqueda de soluciones y correcciones que sean necesarias. Me parece que el gobierno luego de debates hasta duros tomó decisiones para resolver la situación. Fuertes por cierto, se capitalizó a la empresa, se cambió la conducción. Habrá que ver si éstas medidas son correctas o no.
No puedo menos que recordar que no hace tanto el gobierno con otros partidos en el poder, salvaba bancos, los recapitalizaba y luego los devolvía al circuito privado vendiéndolo a cifras ridículas.
Eso es conceptual, es ideológico, es la mirada sobre qué es lo que hay que respaldar desde lo público. No es nada menor la diferencia, quienes votan al Frente Amplio votan fortalecer al Estado y no desmembrarlo.
Creo que la conducción de Ancap del compañero Sendic tiene que ser evaluada. Como evaluación con luces y sombras, con aciertos y errores. Si la conclusión es que cometió más errores que aciertos tendremos que cuestionarnos los frenteamplistas, nuestra capacidad para elegir a nuestros candidatos, a nuestros dirigentes por elegirlos.
Pero que el famoso Cuarto Poder, instale discusiones, condicione juicios de valor y conductas sin matices, sin un arco de inflexión, así sin anestesia, me parece de una intencionalidad política clara, en realidad oscura. El gobierno frenteamplista tomó decisiones para corregir la política de Ancap. ¿Se discute la capitalización, el nombramiento de la nueva gerenta?….no, parece que la licenciatura sin licencia de Sendic da más rédito.
No voté a Sendic en las elecciones, voté al Frente Amplio, la fórmula no fue la que yo hubiera elegido pero fueron nuestros candidatos. Espero que Sendic esté siendo un buen vicepresidente. Es la función para la que fue electo, tenemos los frenteamplistas la posibilidad en caso que no nos guste su trabajo de no candidatearlo. Tiene la Justicia herramientas jurídicas para evaluar y juzgar sus acciones al frente de Ancap. Pero no me parece serio pasar de la discusión sin escalas de Ancap a la licenciatura con el mismo fervor mediático.
Creo que desde el Frente Amplio debemos ser cuidadosos en como llevamos adelante esta discusión. Miles de frenteamplistas votaron al compañero, hay representantes del sector en toda la administración, es fácil cavar trincheras de a favor y en contra. Amplifica las polarizaciones sencillas. La prensa, que por cierto en los grandes medios no es frenteamplista no estimula más que el conflicto. Periodistas sutiles, llaman a Cuba buscando evidencias de la falsedad, como si realmente los miles de votos que recibió hubieran sido convocados por la famosa abreviación Lic.
Luego de eso ¿qué?…. espero que la nueva aparición mediática de Huidobro no nos sumerja en un conflicto desenfrenado de titulares y simplezas mediáticas. También los temas de Defensa nos obligan a discutir, pensar y llegar a conclusiones.
Por estos días y con insistencia el compañero Paternain ha presentado reparos y cuestionamientos a la política llevada adelante por el Ministerio del Interior y por el de Defensa. Curiosamente estas opiniones no adquieren la misma relevancia mediática. Parece ser que estas opiniones no fueran tan trascendentes.
Sin embargo la seriedad conceptual en sus argumentos abriría un debate sobre éstos temas que parecen no tener el mismo valor mediático.
Los medios amplifican las respuestas de Bonomi a los dichos de Huidobro, pero no amplifican al debate público los cuestionamientos más de fondo que realiza Paternain desde varios ángulos y desde hace tiempo.
Creo que una vez más los medios eligen que discusiones, que declaraciones amplificar y cuáles no. Al hacerlo, definen sobre lo que se discute y como.
A veces tengo la sensación que el cuarto poder aspira a estar mejor rankeado que los poder institucionales del Estado.
Por Walter Martinez
Columnista uruguayo
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