La política de “tolerancia cero” adoptada por el Gobierno estadounidense para frenar la inmigración ilegal en la frontera con México ha separado a cerca de 2000 niños de sus padres. La primera dama, Melania Trump, es una de las voces críticas. La agencia ProPublica, un grupo de periodismo de
investigación, dio a conocer una grabación en la que se escucha el llanto de varios niños separados de sus padres en la frontera sur de Estados Unidos.
– «¡Papi!» (…)» Mami…», dicen algunos niños entre sollozos.
ProPublica, una prestigiosa red de periodistas de investigación sin fines de lucro, publicó en su portal web un audio en el que se pueden escuchar a algunos menores llorando, pidiendo por sus padres y a un hombre de voz adulta, presuntamente uno de los guardias del lugar donde los niños están recluidos, diciendo en tono de burla “aquí tenemos una orquesta (…) solo falta el director”.
Aunque el audio no ha sido autentificado por las autoridades, varios medios de comunicación estadounidenses como The New York Times,The Washington Post y CNN han replicado la pieza.
La agencia indicó que la persona que realizó la grabación, en anonimato para evitar represalias, reveló que los niños tienen entre 4 y 10 años de edad. EEUU.se retiró del Consejo de Derechos Humanos de la ONU El secretario General de la ONU, Antonio Guterres, lamentó la decisión diciendo que «hubiera preferido mucho» que Estados Unidos permaneciera en el consejo. «La arquitectura de derechos humanos de la ONU juega un papel muy importante en la promoción y protección de los derechos humanos en todo el mundo», dijo en un comunicado. La diplomacia estadounidense ya no escondía sus diferencias con el Consejo, al que Washington acusaba de ser movido por sentimientos contrarios a Israel, y por la presencia de países que el gobierno considera no deben tener un asiento. El Consejo de Derechos Humanos de la ONU fue creado en 2006 para substituir a la Comisión de Derechos Humanos y está formado por 47 países miembro escogidos por mayoría absoluta en la Asamblea General de la ONU. En junio de 2017 Haley ya había exigido una reforma del Consejo, y este año Washington impulsó un proyecto de resolución que contemplaba cambios profundos en ese grupo. Entre las propuestas estadounidenses se destacan un dispositivo para que países acusados de cometer violaciones a los derechos humanos puedan ser excluidos del Consejo con mayoría simple en la Asamblea y no con el voto de dos tercios. Exigía también que la cuestión de los «derechos humanos en Palestina» no sea incluida en la agenda de forma sistemática.
Estados Unidos se retiró del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, anunció este martes la representante estadounidense Nikki Haley, quien calificó a esa instancia como un «nido de motivaciones políticas». «Tomamos este paso porque nuestro compromiso no nos permite seguir siendo parte de una organización hipócrita y centrada en sí misma que hace una burla de los derechos humanos», expresó.
Aunque el presidente de Estados Unidos asegura que solo está cumpliendo la ley, los casos se han incrementado exponencialmente en los últimos días y las críticas arrecian en su país e internacionalmente. A los centros de detención se les compara con campos de concentración. «Estados Unidos no será un campo de inmigrantes, y no será un complejo para mantener refugiados», ha afirmado el mandatario, que asegura que su país no va a vivir la misma crisis migratoria que se vive en Europa como justificación de la severidad de las medidas.
Trump culpa a las familias migrantes por poner a sus hijos en esa situación de riesgo y culpa también a los demócratas porque, según él, son los autores de la legislación que lleva a la separación de las familias y se han negado a acordar una nueva normatividad. Diferentes sectores, a nivel nacional e internacional, han desmentido su afirmación. La misma legislación existe desde hace años, pero solo con la nueva política de Trump ha producido este efecto.
La separación de niños de sus familias venía dándose desde el año pasado. Entre octubre de 2017 y abril de este año, unos 700 niños fueron separados de sus padres y retenidos por semanas o enviados a centros de acogida, antes de poder reunirse de nuevo con sus familias.
Pero en mayo de este año, Trump ordenó medidas más rígidas y el fiscal general, Jeff Sessions, anunció la política de tolerancia cero que consiste en que toda persona que ingrese clandestinamente a EE.UU. será detenida y enfrentará cargos criminales. Como los adultos y los niños se enfrentan a procedimientos diferentes, los niños son separados de sus padres. En apenas cinco semanas de la aplicación de esta política, el número de niños separados de sus padres aumentó a más de 2.300.
Una vez separados de sus padres, los niños son entregados a la Oficina de Instalación de Refugiados (ORR, en inglés), del Departamento de Salud y Servicio Humanos. Allí, permanecen en centros de acogida, donde duermen en colchones sobre el concreto en unidades delineadas por cercas metálicas que ofrecen al conjunto la impresión de una enorme jaula. Un grupo de 14 legisladores visitó uno de los centros donde se encuentran recogidos niños y niñas. «Son jaulas», dijo el legislador Mark Pocan, sin poder disimular su indignación. La prensa local divulgó imágenes en las que pueden verse adultos reunidos en áreas divididas por cercas de alambre, y también audios desgarradores registrados en uno de los centros para menores de edad.
«¡Mami!», «¡papi!», repetían niños centroamericanos llorando. «Yo no quiero que paren a mi papá, no quiero que lo deporten», susurra una niña en la grabación difundida por el sitio Pro Publica. Las críticas proliferan en el ámbito internacional. La oficina del secretario general de la ONU, el portugués Antonio Guterres, que por lo general no se refiere directamente a la situación de países específicos, advirtió a Estados Unidos que los niños «no deben ser separados de sus familiares y deben ser tratados con respeto y dignidad».
«Los niños no deben ser traumatizados siendo separados de sus padres. Debe preservarse la unidad familiar», aseguró el vocero de Guterres, Stephane Dujarric. El alto comisionado de la ONU para Derechos Humanos, Zeiz Ra‘ad Al Hussein, apuntó que la medida es «inadmisible» y «cruel» y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó su «profunda preocupación” por la política.
México, a su vez, la calificó de cruel e inhumana. «Quiero a nombre del gobierno y del pueblo de México expresar nuestra más categórica y enérgica condena a una política cruel e inhumana», dijo su canciller Luis Videgaray. También puede leer: La crítica de Melania Trump a la separación de inmigrantes de sus hijos en la frontera de Estados Unidos
Y en el campo local, las críticas han llegado tanto de demócratas como de republicanos. La líder del bloque de legisladores demócratas en la Cámara Representantes, Nancy Pelosi, calificó como bárbara la normativa, que en su opinión viola las leyes de asilo y los derechos constitucionales de su país. Laura Bush, esposa del expresidente George W. Bush, afirmó que la política «es inmoral y rompe mi corazón». Incluso, la primera dama Melania Trump afirmó que odia ver niños separados de sus familias y dijo que espera que demócratas y republicanos logren una reforma migratoria.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, instó a la administración de Donald Trump a no separar a los niños de sus padres al tiempo que calificó esa política como “inadmisible”. “Pido a Estados Unidos que detenga de inmediato la separación forzosa de estos niños y aliento al gobierno a ratificar finalmente la Convención sobre los Derechos del Niño”, agregó el titular. A propósito, EE.UU. anunció este 19 de junio su retira del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Así lo confirmó la embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Nikki Haley. «Al hacerlo, quiero dejar en claro que este paso no es un retroceso de nuestros compromisos con los derechos humanos», dijo la funcionaria.
Con EFE y Reuters
La ONDA digital Nº 867 (Síganos en Twitter y facebook)
(Síganos en Twitter y Facebook)
INGRESE AQUÍ POR MÁS CONTENIDOS EN PORTADA
Las notas aquí firmadas reflejan exclusivamente la opinión de los autores.
Otros artículos del mismo autor:
- BRICS como alternativa al capitalismo
- Orsi, ante la muerte de José Díaz, ”Imposible explicar el último medio siglo del Uruguay sin su aporte”
- La cubano Rosa María Payá, nueva titular CIDH -OEA
- El G7 volvió a beneficiar a las multinacionales
- Uruguay celebró el legado de Carlos Gardel con un homenaje especial en su pabellón de Expo Osaka