El mito de la mano de obra barata

Tiempo de lectura: 4 minutos

China es el Sur lluvioso y cálido; es también la China del Norte con sus inmensas extensiones de suelos de loess, con sus inviernos rigurosos, la Manchuria de los bosques, los desiertos helados del Norte.

Toda la China septentrional, en cuya extremidad se encuentra la capital, está sometida a fríos extremos. China durante milenios fue un pueblo de campesinos, que en  invierno para desafiar el frío, dormían sobre un horno. Para calentar el triperío, lo primero era calentar un gran tazón de arroz, acompañado de un pequeño plato de jengibre adobado.

Los pobres y los mendigos se calentaban las manos apretando ese tazón y hundiendo la cabeza entre los hombros, para paliar el frio.

Los chinos durante siglos no conocieron la carne en su dieta. En China el número cinco es sagrado. El gokost son los cincos alimentos que daba la tierra: arroz, guisantes blancos, mijo, legumbres y cebada. Esta última para alimentar el ganado pero que permitía hacer harina y por lo tanto pasteles. Del arroz se hace el sake –aguardiente-. En algunos lugares de ese extenso país, los campesinos- no siempre- comían pescado, y otro tipo de carnes, muy  poca o casi nada.

Si los chinos de antes de la revolución hubiesen comido carne como preferente en su dieta, no le alcanzaría toda la fertilidad de sus tierras. Los ricos incluso comían carne de cerdo, en pequeños pedazos, para abrir el apetito.

La inmensa mayoría de los chinos no conocían la leche, la manteca y el queso. Digo esto para tener una idea de la herencia que recibió la RPCH en octubre de 1949.

No era que la  carne les repugnara. Si una animal moría por accidente o enfermedad, sea buey, oveja, camello, burro; se comía inmediatamente sin importar si estaba sana o podrida, la carne. Todo bicho que camina va a parar al asador. Refrán que encajaba perfecto para un pueblo mal alimentado.

Este pueblo se acostumbró durante siglos a comer serpientes, ranas, ratas, saltamontes y hasta perros. La cocina china es maestra en condimentar, para suplir sus carencias alimenticias. Aprovechaban y sigue siendo parte de la cultura, todo lo que nosotros- los que podemos- desperdiciamos.

¿Se entiende por qué son vegetarianos? El 98% de las calorías provenían de los vegetales. Los hidratos de carbono del trigo, el mijo y el arroz; las proteínas de la soja, los granos de mostaza y diferentes aceites vegetales.

En 1949, la revolución la hicieron, millones de chinos hambrientos, que vivían en promedio 36 años.

La China de Mao a pesar de errores y algunos horrores, empezó por mejorar la dieta de los chinos. Eran casi 700.000.000. Empezó un camino que recién en el siglo XXI completó –casi nada- con Xi Jinping: que no quede ningún chino sin comer ningún día del año. ¡En China no hay ollas populares!

El socialismo en China logró que en un país que solo tiene el 6% de sus tierras cultivables,  su agricultura alimente el 22% de la población mundial. No tiene precedente en la historia de la humanidad.

En 70 años se sacaron de la pobreza 800.000.000 de seres humanos. De un país de campesinos con casi nulo desarrollo se transformó en una potencia mundial, donde hay hoy 600.000.000 que integran la “clase media”- casi el doble de toda la población de EE.UU-. Se eliminó la pobreza en una población de 1400.000.000.

En el poder blando China sigue perdiendo. Todos los días inventan algo para desacreditar el proceso de construcción del socialismo con particularidades chinas. Una de las mentiras es que la mano de obra es barata.

En 2020 en plena pandemia, la compras online en China triplicaron a las de EE.UU.

En el libro “Un tango con el dragón”, de la editorial Aguilar, del consultor de negocios con China, Nicolás Santo; en las páginas 145-146, dice:

“Hay una confusión importante acerca de China”, comenzó diciendo Tim Cook de Apple, durante su participación en el Fortune Global Forum, un evento que reunía a los principales líderes de negocios del planeta en Guangzhou. Cook decidió explayarse:

“La concepción popular es que las empresas extranjeras vienen a China porque el costo de la mano de obra es barato. No estoy seguro a qué parte de China van quienes eso dicen, pero la realidad es que China dejó de ser un país de mano de obra barata hace muchos años. Esa no es la razón por la cual Apple viene a China desde el punto de vista de la cadena de suministro. Lo hacemos por el tipo de habilidades de los trabajadores y por la escala en la que esas habilidades se encuentran disponibles. Los productos que fabricamos requieren el uso de herramientas avanzadas y la precisión que se requiere para trabajar con ellas, así como también con los materiales que necesitamos es muy alta. Si en Estados Unidos organizáramos una reunión de técnicos que dominan estas herramientas, no estoy seguro de que pudiéramos llenar una habitación, mientras que, en China, podríamos llenar varios campos de fútbol. Ocurre que, en China, la educación vocacional llega hasta lo más profundo. Reconozco que el sistema educativo ha jugado un rol esencial en ese sentido. Otros países no entendieron la importancia de la educación vocacional, pero China la entendió a la perfección desde el principio.”

China es líder mundial en la industria, es líder mundial en tecnología y en innovación. Ha demostrado que se puede llevar la innovación a todos los sectores sociales.

 

Por el Prof. Gonzalo Alsina

 

Síganos en Twitter y facebook
INGRESE AQUÍ POR MÁS CONTENIDOS EN PORTADA

(Síganos en TwitterFacebook)
INGRESE AQUÍ POR MÁS CONTENIDOS EN PORTADA

Las notas aquí firmadas reflejan exclusivamente la opinión de los autores.