Por primera vez en su (casi) cuarto siglo de existencia, el recién culminado Encuentro del Foro de Sâo Paulo en su vigésima edición se realizó en Bolivia, en la ciudad de La Paz, sede del gobierno del Estado Plurinacional. Fue un hecho destacado, realzado por la presencia y participación de cerca de un millar de delegados e invitados, representando a los partidos miembros del Foro de la América Latina y caribeña, y a un conjunto de países de la Unión Europea, así como de Asia (China, Vietnam y Japón, entre otros). El XX Encuentro permitió medir el camino recorrido por el Foro desde su fundación en 1990; pero también, en particular, apreciar los avances registrados en Bolivia desde que Evo Morales en dupla con Álvaro García Linera accedieran al gobierno por la voluntad de su pueblo.
El presidente Evo Morales se vio imposibilitado de pudo asistir a la clausura del evento, como estaba previsto, porque lo impidieron las condiciones meteorológicas. Su helicóptero no pudo levantar vuelo desde Santa Cruz de la Sierra, donde protagonizó un acto en las horas previas. Todos lo lamentamos profundamente. Pudimos acceder a un documento a un documento referido a la sesión de honor de la Asamblea Legislativa Plurinacional efectuada el pasado 6 de agosto en el 189º aniversario de la independencia de Bolivia en Sucre, capital constitucional del Estado. Allí el presidente realizó un balance de 9 años de gestión, con índices significativos de crecimiento en todos los órdenes, que resumió en el siguiente concepto: “En lo político la refundación (a través de la Asamblea Constituyente), en lo económico la nacionalización (de los hidrocarburos), en lo social la redistribución de la riqueza para bien de todas y todos”.
Los índices y las gráficas respectivas aluden al crecimiento económico (6,8% el año pasado), la mayor renta petrolera para el Estado, mayor inversión extranjera directa, empleo y salario dignos, caída del desempleo, crecimiento de las reservas internacionales, disminución de la pobreza extrema (cero pobreza extrema en 2025 es el objetivo) y de la desigualdad, créditos y ahorros en bolivianos, bono Juancito Pintos para los niños, aumento de los depósitos del público al sistema financiero, lucha contra el narcotráfico, desarrollo energético potente, elevación de la industria alimenticia, integración vial de oriente a occidente y de sur a norte, integración ferroviaria y fluvial, construcción de los puentes más grandes de Bolivia, aeropuertos internacionales en 9 departamentos, industrialización de los recursos naturales, industria del medicamento, reducción de la edad de jubilación para trabajadores de industrias insalubres, aguinaldo para las personas de mayor edad. La renta petrolera alcanzaba en 2005 a 600 millones de dólares y el año pasado se elevó a 5459 millones de dólares. “Esa es la lucha del pueblo boliviano y la conciencia del pueblo boliviano”, afirmó el presidente.
También tuvimos ocasión de apreciar las danzas bolivianas típicas (en particular la maravillosa diablada), sus canciones y otras expresiones artísticas. Estuvimos en contacto con Leónida Zurita, indígena que desempeña la secretaría de relaciones internacionales del MAS (Movimiento al Socialismo), de activa participación en el evento. Fui ella la que planteó el reconocimiento a la iniciativa conjunta de Lula y Fidel Castro en la génesis del Foro, y se nos dice que se ocupaba personalmente, desde las cinco de la mañana, en los arreglos florales, de un buen gusto exquisito, de la sala de sesiones. El canciller David Choquehuanca aportó su peculiar visión del socialismo comunitario (como veremos luego), que enriqueció el debate general. A poco más de un mes de las elecciones (12 de octubre) la fórmula Evo Morales-Álvaro García Linera cuenta con 65% de las intenciones de voto y sin duda tendrá a su cargo el próximo gobierno.
Por realizarse en Bolivia, en el encuentro no podía estar ausente el recuerdo de Ernesto Ché Guevara. Lo evocó un representante sandinista, Jacinto Suárez, quien en la jornada inaugural recordó la figura del Che, asesinado en La Higuera el 9 de octubre de 1967. “Estamos reunidos en Bolivia los representantes de la izquierda latinoamericana –dijo entre aplausos sostenidos- y el primer recuerdo es el del ciudadano más grande que ha producido América Latina, quien murió en estas tierras que guardaron sus huesos durante muchos años”.
Canciller Choquehuanca: Un socialismo por la vida
El XX Encuentro transcurrió bajo el lema: “Derrotar la pobreza y la contraofensiva imperialista, conquistar el Vivir Bien, el desarrollo y la integración de Nuestra América”. El canciller David Choquehuanca expresó la visión típicamente boliviana de este lema general, con todas sus especificidades, y su contenido esencial se resume en esta frase: “El Vivir Bien plantea un socialismo por la vida, para trabajar por garantizar la vida de los seres humanos y de la Madre Tierra”.
En su intervención en la sesión inaugural (también habló brevemente en la sesión de clausura) se remontó a la conquista de nuestro continente, 500 años atrás. “Hemos sido desintegrados, nos han dividido, nos han descuartizado. No sólo han descuartizado a nuestro líder Túpac Katari, sino nuestro continente han descuartizado. Y desde aquí tenemos que empezar a trabajar la unidad, para volver nuevamente a ese camino del equilibrio, de la complementariedad, del consenso, con identidad propia. Por eso nuestros presidentes han empezado a trabajar en el fortalecimiento de esos espacios de integración, para volver a integrarnos”, valorando en ese sentido el aporte fundamental de la creación de la UNASUR y de la CELAC.
Dijo que en el Vivir Bien trabajamos por la profundización de la democracia y por la búsqueda del consenso. Recordó que en las Naciones Unidas el presidente Evo Morales planteó los derechos de la Madre Tierra y que por su iniciativa se declaró el 22 de abril como Día de la Madre Tierra. “En las Naciones Unidas hemos empezado a trabajar en derechos humanos, derechos colectivos, derechos sociales, derechos de los pueblos indígenas. Hemos logrado después de décadas que las Naciones Unidas formulen la declaración de los Derechos de los Pueblos Indígenas, y seguimos avanzando” con la ideología de la unidad, de la complementariedad, del consenso, del equilibrio. “Todo lo que hacemos tiene que ser en función de todo lo que existe, en función siempre de la vida”.
Después de expresar su solidaridad con “nuestros hermanos en Palestina”, señaló que “es importante recuperar los saberes de los pueblos indígenas, valorar nuestras raíces” y que “hemos decidido volver a ser y gobernarnos a nosotros mismos, resolver nuestros problemas con el poder comunal, el poder de todos, el gobierno de todos. Tenemos que delinear el camino por donde vamos a caminar todos, y todo en función de la vida”. Citó al respecto un concepto del sabio Albert Einstein, y prosiguió: “Tenemos responsabilidades, no solamente con nuestras organizaciones, con nuestros países, con nuestro continente, sino con nuestro planeta, con la vida. Somos hermanos, pero no solamente los seres humanos somos hermanos. Todos los que nos alimentamos de la leche de la Madre Tierra, que es el agua, somos hermanos. Y vivimos en las faldas de la Madre Tierra, de nuestra Pachamama. Por eso planteamos un socialismo por la vida. ¡Jallalla!”.
Vista al futuro: resoluciones múltiples y plan de acción
El encuentro adoptó una serie de resoluciones: de apoyo al pueblo palestino frente al genocidio perpetrado por el gobierno de Israel en la Franja de Gaza, que tras 51 días de bombardeos arrojó 2145 muertos, entre ellos 581 niños, más 10.890 heridos que quedaron con secuelas, además de 60 mil hogares completamente destruidos y otras 20 mil viviendas con daños parciales. Un representante palestino ocupó la tribuna en la sesión plenaria final, lo mismo que delegados de Cataluña y del País Vasco, con cuyos pueblos el encuentro también manifestó apoyo a su justa lucha. Hubo asimismo pronunciamientos sobre Cuba, de denuncia al criminal bloqueo y por la libertad de los cinco luchadores antiterroristas; de solidaridad con Venezuela por la lucha de pueblo y gobierno contra las maniobras golpistas; de apoyo a la Argentina en su lucha contra los fondos buitres y por su soberanía sobre las Islas Malvinas, incluido esto último en las definiciones anticolonialistas que abarcaron a Puerto Rico y a una serie de territorios insulares como Martinica, Guadalupe, Aruba, Bonaire, Curazâo y la llamada Guayana Francesa, reafirmando su derecho a la autodeterminación. Se registró un apoyo expreso al diálogo de paz que se desarrolla en La Habana entre el gobierno de Colombia y las FARC, y su extensión a otros grupos como el ELN y el EPL. En el caso de Honduras, se manifestó el apoyo al partido LIBRE y la denuncia de los recientes crímenes políticos perpetrados por el régimen. Desde luego, se manifestó el apoyo expreso a Bolivia por una salida al mar.
En reuniones especiales se consideró la situación de las distintas regionales del Foro de Sâo Paulo: Regional Sur, Regional andino-amazónica, Regional mesoamericana y caribeña. Se reunió asimismo, como es habitual, el Foro de Parlamentarios, que adoptó resoluciones a ser aplicadas en su radio de acción. Se realizaron talleres múltiples, como el de mujeres, de jóvenes y de escuelas de formación política. Sin contar una multiplicidad abigarrada de reuniones bilaterales y multilaterales (como por ejemplo con los representantes de los partidos de la izquierda europea, PIE), que funcionaron en los días previos y en los intervalos de las sesiones plenarias.
Se aprobaron, tras debate exhaustivos, varias incorporaciones de sectores políticos que fortalecen al Foro de Sâo Paulo. La declaración final, ampliamente discutida en las sesiones previas, fue aprobada por aclamación en la sesión de clausura. Asimismo fue aprobado un detallado plan de acción, que incluye varios capítulos (por ejemplo, de la Secretaría Europa y de la Secretaría Estados Unidos) a ser aplicado antes de la realización del próximo Encuentro del Foro, que se resolvió realizar en Ciudad de México en el año 2015.
Una resolución especial condensa la actividad inmediata a desplegar por los partidos del Foro en apoyo a las fuerzas de izquierda en las contiendas electorales que se librarán en el mes de octubre en nuestra región, a saber: 5 de octubre, con Dilma Rousseff y Michel Temer en Brasil; 12 de octubre, con Evo Morales y Álvaro García Linera en Bolivia; 26 de octubre, con Tabaré Vázquez y Raúl Sendic en Uruguay. La resolución indica que en estas elecciones la disputa es intensa entre izquierda y derecha y que “nuestra victoria es vital para la continuación del proceso de transformaciones económicas, sociales y políticas en la región latinoamericana y caribeña”.
Por Niko Schvarz
Periodista y escritor uruguayo
La ONDA digital Nº 688 (Síganos en Twitter y facebook)
(Síganos en Twitter y Facebook)
INGRESE AQUÍ POR MÁS CONTENIDOS EN PORTADA
Las notas aquí firmadas reflejan exclusivamente la opinión de los autores.